Entre los alimentos que combinan un sabor delicioso, grandes posibilidades de preparación, comodidad de uso y propiedades saludables, se encuentran las sardinas en lata.
Si hablamos de salud, las sardinas en lata ofrecen altas dosis de vitamina D, fundamental para mantener fuertes el sistema inmunológico y el corazón. Al ser un pescado azul contiene un porcentaje alto de grasas saludables Omega-3, y si elegimos consumirlas envasadas con aceite de oliva, añadiremos un plus de ácido oleico a nuestra dieta. Además aportan grandes valores de fósforo, hierro, magnesio, potasio, yodo y zinc, así como el calcio que en gran cantidad se encuentra en su espina.
Tradicionalmente la conserva de sardina se ha consumido en ese entrañable bocata que desde nuestra infancia es un clásico. Pero con el paso de los años y los cambiantes hábitos de consumo, la sardina en lata se ha convertido también en un recurso en la cocina, que permite la elaboración de innumerables pinchos y platos, y el mercado ofrece variedades y presentaciones para todos los gustos.
La primera lata de sardinas se envasó en 1895 y hoy sigue siendo una de las conservas estrella, consumida en todo el planeta. Nosotros te invitamos a añadir las conservas de sardinas españolas -las mejores del mundo- a tu dieta, pues está demostrando que son una delicia y una gran compañera para tu salud.