Recuperamos una noticia de Ok Diario en la que nos dicen que para comer sano es importante saber que no es necesario tener dietas estrictas, sino que basta con comer de forma equilibrada y variada, evitando los excesos de ciertos alimentos. Para ello, se puede optar por sustituir algunos alimentos por otra versión más saludable.
¿Cómo reemplazar algunos alimentos por su versión más saludable?
Para sustituir ciertos alimentos de uso común por una versión más saludable, podemos comenzar por el desayuno. Aunque es la comida más importante del día, debemos tener cuidado con el exceso de azúcar.
Para ello, podemos reemplazar los zumos envasados por una pieza de fruta natural. También es aconsejable comprar cacao puro en polvo en lugar de usar ciertas marcas de cacao que contienen mucho azúcar. Además, si eres de tostadas, puedes sustituir la mantequilla y las mermeladas industriales por aceite de oliva o aguacate y puré de frutas, respectivamente.
También, según la organización Crear Salud, debemos evitar consumir productos de panadería industrial y alimentos procesados, que pueden ser sustituidos por granos enteros o avena combinados con fruta.
Por otro lado es importante tener en cuenta que los productos ultraprocesados, es decir, aquellos alimentos que ya vienen listos para comer o que sólo necesitan ser fritos en una sartén, en el microondas o en el horno durante unos minutos, tienen poca calidad nutricional.
Es cierto que estos alimentos son muy útiles y suelen gustar a los más peques de la casa. Alimentos tipo canelones o lasañas ya preparados, croquetas, nuggets, pizzas o fideos. Todos estos productos podemos prepararlos en casa, aunque te lleve más tiempo, siempre serán más saludables. Compensa, ¿no creéis?
Estas comidas preparadas también pueden ser sustituidas por platos más saludables y rápidos de hacer. Alimentos como el pescado o marisco en conserva, que puede ser utilizado para añadir un toque a las ensaladas, sándwiches u otras recetas fáciles. También las legumbres que vienen ya cocidas en un frasco son saludables y sirven para hacer ensaladas frescas ideales para el verano o para cocinar purés en invierno.