Tiempo atrás os contábamos la historia de otra de nuestras villas marineras: Combarro, una ciudad de marisqueo intergeneracional. Hoy, nos desplazamos hasta Asturias para contaros una pequeña parte de la historia de Luarca, la villa blanca de la costa verde.
Luarca, es la capital del concejo de Valdés, conocida por su increíble puerto pesquero además de por ser una de las localidades más bonitas de todo el Cantábrico.
Esta villa marinera fue construida alrededor de una cala en forma de “S” entre acantilados escarpados, convirtiendo al casco antiguo de Luarca y a su paseo marítimo en un conjunto digno de conocer.
La fama de Luarca la ha convertido en una de las villas más conocidas de toda Asturias, y no por ser el lugar de origen de uno de los premios Nobel de medicina, Severo Ochoa, si no por albergar muchos de los rincones paisajísticos y gastronómicos del principado. Además, también es conocida por albergar la mejor colección de cefalópodos del mundo ya que se han encontrado 76 ejemplares de hasta 13 metros de longitud y 250 kg de peso que se pueden descubrir en el Parque de la Vida.
Fotografía: comocuidarmispeces.blogspot.com
Productos del mar
Los productos del mar más vendidos en su lonja son: el percebe, la albacora, el aligote, la merluza, la faneca, la lubina, el pulpo, el salmonete y los xargos entre muchos otros.
Pero además de toda esta actividad pesquera, Luarca es el sitio adecuado para comer un buen pescado, pero sobre todo para iniciarse en el marisco y la sidra, ya que en esta villa se encuentran los famosos chigres (antiguas tabernas asturianas) con marcado acento marinero y asturiano.
Nuestros 3 lugares mágicos
Fotografía: fsensations.com
Puerto pesquero y paseo marítimo
Este es el mejor lugar para entrar en contacto y empaparse de la verdadera esencia de este lugar, el mar. Ya que además de estar repleto de restaurantes y bares donde poder disfrutar de su gastronomía, se puede ver entrar y salir a los barcos en sus faenas diarias.
Los jardines de la Fonte Baixa
El mayor jardín botánico privado de Europa a las orillas del Cantábrico con más de quinientas especies distintas originarias de los cinco continentes y repartidas en 20 hectáreas. Realmente impresionante.
Barrio de la Pescadería y mirador de El Chano
El barrio de la pescadería se encuentra próximo al muelle y es, junto al barrio del Cambaral, uno de los primeros asentamientos de la villa. Atravesarás un laberinto de calles estrechas en las que creerás llegar siempre al mismo sitio, pero sin duda, recomendamos subir poco a poco hasta llegar al mirador de El Chano en el que se disfruta de una de las mejores panorámicas del pueblo.
Fotografía de portada: Carlos Cabrera, on Flickr
Fuentes: porsolea.com y miviaje.com