Mejorar tu pizza clásica es tan fácil y rápido como abrir una lata
¿Cómo. puedes mejorar tu pizza de forma fácil? Cambia los ingredientes tradicionales y despliega tu creatividad o crea la masa más crujiente que te puedas imaginar. La pizza ha transcendido culturas y fronteras, convirtiéndose en un lienzo para la creatividad culinaria. Pero, ¿quién dijo que la pizza solo va de pepperoni y queso? Nosotros creemos en la magia de innovar y de descubrir nuevos sabores gracias a las latas de conservas.
3 conservas de pescado que puedes echar a la pizza.
Bonito del norte en aceite de oliva: Añádelo a tu pizza para disfrutar de una textura tierna y un sabor delicado y combínalo con ingredientes frescos como tomate, rúcula y queso feta.
Caballa en aceite de oliva: La caballa es para las personas que buscan una experiencia gustativa audaz. Un pescado que al que le gusta destacar en la pizza gracias a su firmeza y a su sabor intenso, que se complementa a la perfección con pimientos asados, cebolla morada y un sutil toque de queso azul.
Sardinas en aceite de oliva: Mejora tu pizza con la clásica sardina. Complementa a la perfección con los sabores tradicionales de la pizza. Acompáñalas con aceitunas negras, alcaparras y un toque de orégano para un viaje directo a las costas mediterráneas.
Trucos para que la masa de la pizza sea crujiente
Ahora que has descubierto que las conservas transforman tu pizza en algo todavía más sabroso, hay que conseguir una masa de pizza crujiente. Para lograrlo, hay varios factores a considerar. Desde la preparación de la masa hasta el horneado.
- Truco: controla la cantidad del agua que le echas a la masa. Una cantidad alta, entre el 60% y 70% en relación al peso de la harina suele ofrecer mejores resultados en términos de crujiente. A la hora de amasar, tienes que conseguir que la masa de tu pizza sea suave y elástica.
- Mejorar la fermentación: Es mejor que sea lenta y controlada en el refrigerador (de 24 a 72 horas).
- Masa fina: La masa tiene estar fina y debes extenderla con tus manos, pero no trates de desgasificarla, ya que un poco de aire contribuye a una mejor textura.
- Precalienta el horno: Y por último, no te olvides de precalentar el horno, ¡cuánto más caliente mejor! (aproximadamente 330º durante tres minutos y medio, aunque depende del tipo de horno).
Con estos consejos y trucos no sólo estás enriqueciendo tus platos, sino que también estás participando en una tradición de innovación y calidad. Estás a punto de convertirte en un verdadero experto de pizza, así que, ¡Enciende el horno, estira esa masa y prepárate para una experiencia que sorprenderá a todos en la mesa!
